Cuando gane la revolución, se acordarán de que existí
y que sin mí
no pudieron haber ganado tantos corazones.
Recordarán mis manos de acero en su piel de terciopelo,
mi sonrisa de un ave fénix con plumas de violencia.
Me acordaré de sus consejos
y me acusarán de revisionista.
Pero yo
iré
detrás de ella como una rata,
como un bandido,
un amante tras la guerra.
Las guerras
populares prolongadas.
Y se acordarán de que existí.
20081123
Mi muerte
Etiquetas: Poemas
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2 Kwetta:
Y poooooorrrrr qué cambiaste de plantilla?!
excelente blog
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