20080617

Diez Cuarenta

Ahora el mundo guarda silencio
y la vida parece diez centímetros más corta.
Mis cuatro ojos mirando fijamente
afuera, afuera en mi interior
y la luna pequeña
con su sonrisa de diabla; de espada.

Siempre los aludes de tierra,
los geckos siniestros soltando risotadas.
Y ahora no llueve.
Un momento de manos temblando,
de pies titiritando.

Vidas pequeñas en vagancia
e infortunios caninos sin lamentos.

Ahora el letargo de mi madre
de mi hermana
y las galaxias sin mi padre cerca.

Una vez más, la sed:
Pero ahora no llueve.

2 Kwetta:

Oo dijo...

Geométrico...sublime...

Anónimo dijo...

Ventanas, puertas, paredes y alfombras, sillas, mesas y flores, pan, vino,
mantequilla y mermelada, fritanga, carne, habas y todas las especias.

desde hace dos semanas, no sé cómo saben estas cosas.
Sólo espero tomarme una taza de nieve sucia.

Aeropuertos, estaciones del ferrocarril, carreteras, calles y líneas brumosas.
tráfico, luces, coches y aviones, barcos, bicicletas y caminantes.

Ahora me quedo meditabundo, cegado, en la ciudad.
Me rodeo de las torres, hechas de nieve sucia.

Caras, oídos y vientres, partes posteriores, piernas, dedos y pies.
Sudor, lágrimas, cuerpos que gotean, fiestas, alguien está jodiendo.

Ahora estoy en silencio en esta nieve, en este país nevoso.
Estoy colgado hasta que sea viejo, más viejo que ahora.